PREGUNTAS FRECUENTES

Una asesora de sueño infantil puede ayudarte de muchas maneras. Podemos analizar la situación particular de tu peque, detectar si hay o no una privación de sueño y identificar cuáles son sus causas.

Te proporcionamos toda la información relacionada con el descanso de tu peque que te ayudará a comprender cómo funciona el sueño infantil, entender sus necesidades de descanso y conocer cuáles son las herramientas a tu alcance para asegurarte de que duerme todo lo que necesita para tener un sueño de calidad.

Nuestro papel es el de informarte, ayudarte, guiarte, apoyarte y acompañarte en el caso de decidas que necesitas ayuda profesional.

Si crees que tu peque no descansa lo suficiente y que la falta de sueño de vuestra familia empieza a convertirse en una situación problemática, la respuesta es sí. Una privación de sueño prolongada en el tiempo puede tener implicaciones negativas tanto en el bienestar como en la salud de la familia, llegando a puntos casi insostenibles. Si te encuentras en este caso, por favor, consulta a un profesional que pueda ayudarte.

Tener un hijo no implica dejar de dormir, se puede ser padre/madre y descansar también. Es cierto que, durante los primeros meses de vida de un bebé, el sueño de los padres se ve afectado. Pero las noches sin dormir no tienen porqué durar años.

Informarse y documentarse en temas relacionados con el sueño infantil es algo primordial. Conocer y entender el sueño de tu peque te ayudará mucho. Sin embargo, puedes tener toda la información y no saber cómo aplicarla bien en casa o no tener la respuesta a algunas de tus preguntas sobre cómo gestionar según qué situaciones.

También estamos aquí para poder ayudarte a poner en práctica todos esos conocimientos que has adquirido después de tantas páginas de información y que has intentado aplicar sin éxito.

Nuestros programas de sueño tienen dos partes: la parte de preparación y la parte de servicio. Estableceremos una fecha que será la primera noche en la que empezaremos a introducir los cambios y empezará el seguimiento. Un par de semanas antes de esta fecha, iniciaremos el proceso de preparación.

Análisis de la situación. Realizamos análisis global de toda la situación que nos permite ver cuáles son las necesidades de sueño de tu peque y si están cubiertas. También nos permite identificar cuáles son las razones por las que tu peque tiene dificultades para conciliar el sueño, tantos despertares,…

Plan a medida. Creamos un plan a medida de las necesidades de tu peque, fácil de seguir y paso a paso. El objetivo de este plan es que tu peque mejore la calidad de su descanso y que adquiera unos hábitos de sueño saludables de por vida.

Entender el sueño de tu peque. Te proporcionamos el conocimiento clave necesario para entender el sueño de tu peque para que puedas gestionar sus periodos de vigilia, diseñar una buena rutina que prepare su cuerpo para dormir, tener unos horarios adecuados para su edad y, en general, ayudarle a conciliar el sueño de manera natural, relajada e independiente.

Expectativas reales. Te damos expectativas reales en función de la edad de tu peque. Es poco probable que tu peque duerma sin interrupciones durante 12 horas seguidas durante la primera noche del plan de sueño, aunque también puede darse el caso.

Seguimiento diario. Seguimiento personalizado con apoyo y guía durante el proceso de cambio. Nuestro equipo os acompañará en todo el proceso, con el objetivo de ir avanzando paso a paso aportando calma, claridad, experiencia y seguridad.

La probabilidad de éxito es muy alta, hasta ahora los casos de éxito son del 98%. Sin embargo, no todo depende de nosotros, es muy importante que trabajemos como un equipo para implementar los cambios y aplicar las pautas para que tu peque pueda dormir más horas seguidas eliminando los despertares nocturnos y ayudarle a saber cómo conciliar el sueño solito, de una manera relajada.

El camino hacia al éxito pasa por ser constantes y seguir el plan propuesto. Durante todo el seguimiento, estarás en contacto diario con tu asesora de sueño infantil para poder evaluar el progreso de tu peque y hacer pequeños ajustes en el plan si así se requiere.

Te podemos asegurar que haremos todo lo que esté en nuestras manos para conseguirlo. Pero una vez finalice el programa, ya dependerá de vosotros. Os ayudaremos a construir los cimientos y acompañaremos a tu peque en el proceso de adaptación de sus nuevos hábitos de sueño, unos hábitos que habrá que seguir aplicando para que descanse de una manera saludable durante toda la infancia.

El programa de sueño de Baby Sleep Solutions se basa en el acompañamiento y el apoyo en este proceso de cambio para que el peque se adapte mucho mejor a los nuevos horarios y rutinas, para que se acaben convirtiendo en unos hábitos de sueño saludables. En la mayoría de casos implica trabajar también en conseguir que tu peque llegue a tener una relación positiva con su espacio para dormir.

El llanto y las rabietas son las maneras en que los bebés y los niños comunican su desacuerdo ante los cambios. No conocen otro modo de comunicarlo. De este modo, no podemos asegurar que vaya a ser un proceso sin ninguna lágrima, en realidad ningún proceso que implique cambios lo llega a ser.

El proceso de aprendizaje para adquirir nuevas habilidades para tener un sueño de calidad conlleva hacer cambios en unos hábitos que suelen estar muy establecidos. Os podemos asegurar que nosotros estaremos a vuestro lado durante todo el proceso y que vosotros acompañaréis y reconfortaréis a vuestro peque en todo momento.

A partir de los 5 meses y con el peso adecuado, puede ser un buen momento para empezar a establecer ciertos horarios y rutinas que ayuden a tu peque a tener un sueño reparador. Antes de esta edad no se recomienda porque los ritmos circadianos de un bebé todavía no están desarrollados y es mejor esperar a que pase la regresión de los 4 meses para ver cómo evoluciona su sueño.

Claro que no. La lactancia es compatible con nuestros planes de sueño y con el hecho de poder dormir más horas seguidas por la noche. Trabajamos cada caso de manera individualizada y si tu elección es seguir dando el pecho a tu peque, adaptaremos la estrategia a seguir para que puedas hacerlo hasta el momento en el que tú decidas.

Contamos con asesoras de lactancia especializadas en sueño infantil que pueden aportar su experiencia y conocimiento en tu caso.

Sí, en el equipo contamos con Especialistas de sueño que son también Asesoras de lactancia certificadas. Si decides que es el momento de dejar la lactancia, podemos ayudarte en el proceso a la vez que trabajamos en los hábitos de sueño de tu peque.

Los planes de sueño se dividen en dos partes: la parte de preparación (unas dos semanas) y la parte de seguimiento (depende de la modalidad que elijas).

La parte de preparación es el tiempo que dedicamos a recopilar la información necesaria para detectar los problemas de sueño, preparar el plan de sueño para tu peque y tener la primera sesión previa al inicio del plan (primera noche).

Nuestro objetivo es el de ayudarte a establecer hábitos de sueño en la vida de tu peque que le permitan tener un descanso reparador. Nuestro trabajo consiste en guiarte en el proceso de hacer los cambios que necesitéis para que tu peque descanse de una manera saludable y lo que necesita para un correcto desarrollo.

Darle autonomía para dormir es un proceso para ayudar al bebé o al niño a tener la capacidad para conciliar el sueño de manera natural, relajada y por sí mismo. Ayudándole a gestionar y enlazar sus ciclos de sueño y consiguiendo un sueño menos fragmentado y más reparador.

La mayoría de los casos en los que trabajamos presentan dificultades para conciliar el sueño, múltiples despertares nocturnos y cierto desajuste horario, lo que se traduce en un sueño fragmentado y en un déficit de horas de descanso. Uno de los principales motivos es por la necesidad de apoyos que han desarrollado durante los primeros meses de su vida.

Un apoyo de sueño es cualquier elemento, actividad o persona con el que un peque ha desarrollado una relación de dependencia directa para conciliar el sueño. Generalmente, los bebés aprenden a conciliar el sueño utilizando un método determinado a través del cuál crean sus propios hábitos que le ayudan a descansar. A medida que se desarrollan, llega un punto en el que esos hábitos o patrones ya no les funcionan. Es entonces cuando empieza a torcerse la situación y aparecen los primeros indicativos: despertares nocturnos, problemas con las siestas o la dificultad para conciliar el sueño, por ejemplo.